Ante la adversidad, el Rincón Fertilidad Málaga sacó lo mejor de sí para obtener una renta de cinco goles a su favor en el partido de ida de la EHF European Cup. Sin Paula García, que no viajó por su lesión en un dedo, sin Sole López, que no actuó por un golpe en el entrenamiento del pasado jueves, con Rocío Campigli jugando sus primeros minutos tras su lesión de tobillo y con Silvia Arderius sufriendo un esguince en la segunda parte, fueron las más jóvenes del equipo las que dieron un paso adelante para lograr que el equipo malagueño lograse una defensa espectacular durante los sesenta minutos que le dio la primera victoria de su historia en el pabellón de A Sangriña.
Señalaban las jugadoras en la previa la importancia de la defensa y desde luego hicieron un papel brillante que por momentos rozó la perfección. Pese al buen hacer de forma coral, con Laura Sánchez y María Pérez muy vivas en los cruces en búsqueda del robo, con Espe López y Estela Doiro rápidas de piernas en las ayudas y provocando ataques, cabe destacar el papel de Almudena Gutiérrez y Rocío Rojas en el centro de 6-0 malagueño, bien cubiertas detrás por Merche Castellanos, que obtuvo un impresionante 60% de acierto con 16 paradas.
Gracias a su defensa el equipo malagueño fue quien mandó en el marcador desde el 0-2 inicial durante los primeros treinta minutos. Llegaron las visitantes a disfrutar de hasta cuatro goles de ventaja (8-12 en el minuto 22) y le faltó acierto en jugadas bien elaboradas para ampliar la diferencia antes del descanso, aunque también cabe destacar las dos paradas de Merche Castellanos en lanzamientos de siete metros que dejaban un +3 para el Rincón Fertilidad Málaga al acabar la primera parte (10-13).
El Guardés buscó la reacción al inicio de la segunda parte y subió su intensidad. Le costó unos minutos al cuadro malagueño el lograr leer ese aspecto y las gallegas se pusieron a un único gol de distancia (13-14). Pero pronto, con un parcial de 0-3 a su favor, el Rincón Fertilidad Málaga volvió a poseer un pequeño colchón a su favor.
Llegaba entonces el esguince de Silvia Arderius, que le hizo salir de pista (aunque se pudo reincorporar posteriormente), pero ni así bajaba su intensidad el equipo malagueño, que hacía sentir al conjunto gallego que era insalvable la diferencia, consiguiendo incluso ampliarla en el último segundo, precisamente con gol de la central malagueña, para poner el definitivo +5 en el electrónico (16-21), una gran renta que tocará hacer buena en Ciudad Jardín el próximo sábado.
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